miércoles, 11 de septiembre de 2013

20 POEMAS DE AMOR Y UNA CANCIÓN DESESPERADA


                    ÁNGEL GONZÁLEZ





Ángel González Muñiz (Oviedo, 6 de septiembre de 1925 - Madrid, 12 de enero de 2008), su infancia se vio marcada por el fallecimiento de su padre cuando este era muy pequeño, seguido por el asesinato de su hermano, el exilio de su otro hermano y las dificultades de su hermana para ejercer como maestra en la época franquista. En 1943 enferma de tuberculosis, enfermedad que arrastrará secuelas hasta la fecha de su muerte. Ángel González decide estudiar derecho en la Universidad de Oviedo, trasladándose posteriormente a Madrid para estudiar en la Escuela de Periodismo. En 1956 publicó su primer libro, Áspero mundo, que surge de su experiencia como hijo de la guerra civil española. Tras su segundo libro, Sin esperanza, con convencimiento (1961), Ángel González pasó a ser conocido como poeta de la Generación del 50 o Generación de medio siglo. En 1985 le conceden el Premio Príncipe de Asturias de las Letras. Su obra mezcla intimismo y poesía social, con un toque irónico, y trata asuntos cotidianos con un lenguaje coloquial y urbano. El paso del tiempo y la temática amorosa y cívica son las tres obsesiones que se repiten en sus poemas. Su lenguaje es siempre puro, accesible y transparente.



 
"Alga enredada"

Alga quisiera ser, alga enredada,
en lo más suave de tu pantorrilla.
Soplo de brisa contra tu mejilla.
Arena leve bajo tu pisada.
Agua quisiera ser, agua salada
cuando corres desnuda hacia la orilla.
Sol recortando en sombra tu sencilla
silueta virgen de recién bañada.
Todo quisiera ser, indefinido,
en torno a ti: paisaje, luz, ambiente,
gaviota, cielo, nave, vela, viento…
Caracola que acercas a tu oído,
para poder reunir, tímidamente,
con el rumor del mar, mi sentimiento.
-Ángel González, La Primavera avanza: Antalogía, Edición de Susana Rivera, Visor Libros, 2010, pág. 34.


"Reflexión primera"

Despertar para encontrarme esto: la vida así dispuesta, el cielo turbio, la lluvia que lame los cristales. Abrir los ojos para ver lo mismo, poner el cuerpo en marcha para andar lo mismo, comenzar a vivir, pero sabiendo el fracaso final de la hora última. Si esto es la vida, Dios, si este es tu obsequio, te doy las gracias -gracias- y te digo: Guárdalo para ti y para tus ángeles. Me hace daño la luz con que me alumbras, me enloquece tu música de pájaros, pesa tu cielo demasiado, oprime, aplasta, bajo y gris, como una losa. Todo está bien, lo sé.
Tu orden
se cumple.
Pero alguien
envenenó las fuentes
de mi vida, y mi corazón es
pasión inútil, odio
ciego, amor desorbitado,
crisol donde se funden
contrariedades con contradicciones.
Y mi voluntad sigue,
inútilmente,
empeñada en la lucha más terrible:
vivir lo mismo que si tú existieras.

-Ángel González, La Primavera avanza: Antalogía, Edición de Susana Rivera, Visor Libros, 2010, pág. 49.
"Me basta así"

Si yo fuese Dios
y tuviese el secreto,
haría un ser exacto a ti;
lo probaría
(a la manera de los panaderos
cuando prueban el pan, es decir:
con la boca),
y si ese sabor fuese
igual al tuyo, o sea
tu mismo olor, y tu manera
de sonreír,
y de guardar silencio,
y de estrechar mi mano estrictamente,
y de besarnos sin hacernos daño
—de esto sí estoy seguro: pongo
tanta atención cuando te beso—;
                                entonces,
si yo fuese Dios,
podría repetirte y repetirte,
siempre la misma y siempre diferente,
sin cansarme jamás del juego idéntico,
sin desdeñar tampoco la que fuiste
por la que ibas a ser dentro de nada;
ya no sé si me explico, pero quiero
aclarar que si yo fuese
Dios, haría
lo posible por ser Ángel González
para quererte tal como te quiero,
para aguardar con calma
a que te crees tú misma cada día
a que sorprendas todas las mañanas
la luz recién nacida con tu propia
luz, y corras
la cortina impalpable que separa
el sueño de la vida,
resucitándome con tu palabra,
Lázaro alegre,
yo,
mojado todavía
de sombras y pereza,
sorprendido y absorto
en la contemplación de todo aquello
que, en unión de mí mismo,
recuperas y salvas, mueves, dejas
abandonado cuando —luego— callas...
(Escucho tu silencio.
Oigo
constelaciones: existes.
Creo en ti.
Eres.
Me basta).
-Ángel González, La Primavera avanza: Antalogía, Edición de Susana Rivera, Visor Libros, 2010, pág. 99.



--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

José Ángel Buesa


José Ángel Buesa (Cienfuegos, Cuba 1910 - Santo Domingo, República Dominicana, 1982) fue un poeta romántico que escribía poesía basicamente elegíaca. Se le ha conocido como el "poeta enamorado". Su popularidad se debía a la gran sensibilidad de su obra, siendo traducida a varios idiomas. Fue también novelista y escritor de libretos para la radio (novelas radiofónicas) y la televisión cubana, también fue director de célebres programas de radio en las estaciones RHC-Cadena Azul y CMQ. Tras su primera etapa muy productiva, Buesa se ve obligado a abandonar Cuba para peregrinar por España, El Salvador y Santo Domingo. En un poema que dedica a su madre, Buesa refleja el sufrimiento causado por el abandono de su tierra natal.Sus principales obras son: La fuga de las horas (1932), Misas paganas (1933), Babel (1936), Canto final (1936), Oasis, Hyacinthus, Prometeo, La vejez de Don Juan, Odas por la victoria y Muerte diaria (1943), Cantos de Proteo (1944), Lamentaciones de Proteo, Canciones de Adán (1947), Poemas en la arena, Alegría de Proteo (1948), Nuevo oasis, Poeta enamorado (1949) y Poemas prohibidos (1959).
Antologías: Doble antología (1952) y Los mejores poemas (1960).
Póstumamente: Pasarás por mi vida (1997) y Nada llega tarde (2001).





"Celos"

Ya solo eres aquella
que tiene la costumbre de ser bella.
Ya pasó la embriaguez.

Pero no olvido aquel deslumbramiento,
aquella gloria del primer momento,
al ver tus ojos por primera vez

Y se que, aunque quisiera,
no he de volverte a ver de esa manera.
Como aquel instante de embriaguez;
y siento celos al pensar que un día,
alguien, que no te ha visto todavía,
verá tus ojos por primera vez.
-Nada llega tarde (Antología poética). José Ángel Buesa. Introducción y Selección de Pablo Valladolid y Victoria Pereira "Lía". Prólogo de Carilda Oliver Labra. Prefacio de Pepe Domingo Castaño. Editorial Betania. Colección Antologías.

"Mi corazón no sabe lo que espera...": Soneto para la lluvia


Mi corazón no sabe lo que espera,
pero yo sé que espera todavía...
igual que aquella noche que llovía
y te besé bajo la enredadera.

Tu amor se fue como si no se fuera...
pues algo tuyo vuelve cada día...
y me dejaste la melancolía
de doblar el pañuelo a tu manera.

Esta noche de viento y lluvia fría
quiero pensar que si tu amor volviera...
al dejar de llover, ya no se iría.

Y estoy aquí, bajo la enredadera...
y como aquella noche en que llovía
mi corazón no sabe lo que espera.


-
Antología poética, José Ángel Buesa. Editorial Betania. Colección Antologías.

-------------------------------------------------------------------------------


Luis Alberto de Cuenca









Luis Alberto de Cuenca y Prado (Madrid, 29 de diciembre de 1950) es filólogo, poeta, traductor, ensayista, columnista, critico, editor literario e investigador español.

De Cuenca ha ocupado cargos políticos como Director de la Biblioteca Nacional de España (1996-2000) y Secretario de Estado de Cultura (2000-2004). También promovió la creación de la "Fundación Biblioteca de Literatura Universal" (BLU). En 1986 obtuvo el Premio Nacional de la Crítica por la obra poética La caja de plata.

Como traductor, ha traducido textos en griego clásico, latín clásico, latín medieval, francés medieval, provenzal, catalán, francés, inglés, alemán, y entre otros, a autores del mundo clásico grecolatino y del medievo europeo.

Como editor literario ha dirigido las colecciones "Ámbitos literarios (poesía, narrativa, ensayo)", "Selección de Lecturas Medievales", y "La Cabeza de Medusa".
En 2007 se  le concedió el Premio de Cultura (Literatura), por su obra poética. Como cinéfilo colabora en los coloquios de los programas televisivos.



"La herida"

Nada, ni el sordo horror, ni la ruidosa
verdad, ni el rostro amargo de la duda,
ni este incendio en la selva de mi cuerpo
que amenaza con no extinguirse nunca,
ni la terrible imagen que golpea
mis ojos y tortura mi cerebro,
ni el juego cruel, ni el fuego que destruye
esa otra imagen de armonía y fuerza,
ni tus palabras, ni tus movimientos,
ni ese lado salvaje de tu calle,
impedirán que encienda en tu costado
la luz que da la vida y da la muerte:
tarde o temprano sangrará tu herida,
y no será momento de hacer frases.


-
Antología de la poesía española del siglo XX (II) 1940-1980. Edición de José Paulino Ayuso. Clásicos Castalia. Madrid. Editorial Castalia.

"La malcasada"

Me dices que Juan Luis no te comprende,
que sólo piensa en sus computadoras
y que no te hace caso por las noches.
Me dices que tus hijos no te sirven,
que sólo dan problemas, que se aburren
de todo y que estás harta de aguantarlos.
Me dices que tus padres están viejos,
que se han vuelto tacaños y egoístas
y ya no eres su reina como antes.
Me dices que has cumplido los cuarenta
y que no es fácil empezar de nuevo,
que los únicos hombres con que tratas
son colegas de Juan en IBM
y no te gustan los ejecutivos.
Y yo, ¿qué es lo que pinto en esta historia?
¿Qué quieres que haga yo? ¿Que mate a alguien?
¿Que dé un golpe de estado libertario?
Te quise como un loco. No lo niego.
Pero eso fue hace mucho, cuando el mundo
era una reluciente madrugada
que no quisiste compartir conmigo.
La nostalgia es un burdo pasatiempo.
Vuelve a ser la que fuiste. Ve a un gimnasio,
píntate más, alisa tus arrugas
y ponte ropa sexy, no seas tonta,
que a lo mejor Juan Luis vuelve a mimarte,
y tus hijos se van a un campamento,
y tus padres se mueren.

-Antología de la poesía española del siglo XX (II) 1940-1980. Edición de José Paulino Ayuso. Clásicos Castalia. Madrid. Editorial Castalia."Desayuno"

Me gustas cuando dices tonterías,
cuando metes la pata, cuando mientes,
cuando te vas de compras con tu madre
y llego tarde al cine por tu culpa.
Me gustas más cuando es mi cumpleaños
y me cubres de besos y de tartas,
o cuando eres feliz y se te nota,
o cuando eres genial con una frase
que lo resume todo, o cuando ríes
(tu risa es una ducha en el infierno),
o cuando me perdonas un olvido.
Pero aún me gustas más, tanto que casi
no puedo resistir lo que me gustas,
cuando, llena de vida, te despiertas
y lo primero que haces es decirme:
«Tengo un hambre feroz esta mañana.
Voy a empezar contigo el desayuno».


-
Antología de la poesía española del siglo XX (II) 1940-1980. Edición de José Paulino Ayuso. Clásicos Castalia. Madrid. Editorial Castalia.

---------------------------------------------------------------------------


Gabriela Mistral

Gabriela Mistral, seudónimo de Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga (Vicuña, Chile 7 de abril de 1889 - Nueva York, 10 de enero de 1957), fue una destacada poetisa, diplomática, feminista, pedagoga y la primera latinoamericana premiada con el Nobel.

En 1914 obtiene un premio en un concurso de literatura, por sus Sonetos de la Muerte, desde entonces utilizó el seudónimo de Gabriela Mistral, en homenaje a dos de sus poetas favoritos, Gabriele D´Annunzio y Frédéric Mistral.



Desolación, su primera obra maestra, aparece en Nueva York en 1922. Un año después, se inaugura su estatua en México y se publica su libro Lectura para mujeres. En 1924 publica Ternura, libro en el que practica una novedosa "poesía escolar", renovando los géneros tradicionales de la poesía infantil. 
Sus diversos poemas escritos para los niños se recitan y cantan en muy diversos países en la actualidad.

"Besos"

Hay besos que pronuncian por sí solos
la sentencia de amor condenatoria,
hay besos que se dan con la mirada
hay besos que se dan con la memoria.

Hay besos silenciosos, besos nobles
hay besos enigmáticos, sinceros
hay besos que se dan sólo las almas
hay besos por prohibidos, verdaderos.

Hay besos que calcinan y que hieren,
hay besos que arrebatan los sentidos,
hay besos misteriosos que han dejado
mil sueños errantes y perdidos.

Hay besos problemáticos que encierran
una clave que nadie ha descifrado,
hay besos que engendran la tragedia
cuantas rosas en broche han deshojado.

Hay besos perfumados, besos tibios
que palpitan en íntimos anhelos,
hay besos que en los labios dejan huellas
como un campo de sol entre dos hielos.

Hay besos que parecen azucenas
por sublimes, ingenuos y por puros,
hay besos traicioneros y cobardes,
hay besos maldecidos y perjuros.

Judas besa a Jesús y deja impresa
en su rostro de Dios, la felonía,
mientras la Magdalena con sus besos
fortifica piadosa su agonía.

Desde entonces en los besos palpita
el amor, la traición y los dolores,
en las bodas humanas se parecen
a la brisa que juega con las flores.

Hay besos que producen desvaríos
de amorosa pasión ardiente y loca,
tú los conoces bien son besos míos
inventados por mí, para tu boca.

Besos de llama
llevan los surcos de un amor vedado,
besos de tempestad, salvajes besos
que solo nuestros labios han probado.

¿Te acuerdas del primero...? Indefinible;
cubrió tu faz de cárdenos sonrojos
y en los espasmos de emoción terrible,
llenáronse de lágrimas tus ojos.

¿Te acuerdas que una tarde en loco exceso
te vi celoso imaginando agravios,
te suspendí en mis brazos... vibró un beso,
y qué viste después...? Sangre en mis labios.

Yo te enseñé a besar: los besos fríos
son de impasible corazón de roca,
yo te enseñé a besar con besos míos
inventados por mí, para tu boca.


Apegado a mí
    Velloncito de mi carne,
    Que en mi entraña yo tejí,
    Velloncito friolento,
    ¡Duérmete apegado a mí!

    La perdiz duerme en el trébol
    Escuchándole latir:
    No te turben mis alientos,
    ¡Duérmete apegado a mí!

    Hierbecita temblorosa
    Asombrada de vivir,
    No te sueltes de mi pecho:
    ¡Duérmete apegado a mí!

    Yo que todo lo he perdido
    Ahora tiemblo de dormir.
    No resbales de mi brazo:
    ¡Duérmete apegado a mí!
- Antología poética. Gabriela Mistral. Prólogo y edición de Rosalía Aller. (Versión tomada de Poesías completas. Ed. Margaret Bates. Madrid. Aguilar. 1970) Biblioteca Edaf - 245. Editorial EDAF S.A.

----------------------------------------------------------------------------


Luis Cernuda





Luis Cernuda Bidón (Sevilla, 21 de septiembre de 1902 - México, D.F, 5 de noviembre de 1963) fue un poeta y crítico perteneciente a la Generación del 27.

En 1925 conoce a Juan Ramón Jiménez y publica sus primeros poemas en Revista de Occidente. En 1926 viaja a Madrid; colabora en La Verdad, Mediodía y Litoral, esta última una revista malagueña de Manuel Altolaguirre. En 1927 publica su primer libro lírico, Perfil del aire.


Un amor insatisfecho inspirará sus libros Donde habite el olvido y Los Placeres Prohibidos. También colabora en la revista Octubre de Rafael Alberti. Al año siguiente publica Donde habite el olvido. En 1936, colabora en un homenaje a Valle-Inclán y publica la primera edición de su obra poética completa hasta entonces, bajo el título de La realidad y el deseo
En 1944 un nuevo amor le inspira los poemas de Vivir sin estar viviendo, como crítico literario. En México se vuelve a enamorar de otro hombre, en este caso de Salvador Alighieri, al que están dedicados los Poemas para un cuerpo.
En 1959, muere Manuel Altolaguirre y Cernuda se ocupa de editar las Poesías completas de este.
Cernuda no negó su condición homosexual, escribiendo unos versos sobre este tema refiriéndose a la sociedad española de entonces, «un país donde todo nace muerto, vive muerto y muere muerto», (Desolación de la Quimera).

"Te quiero"

Te quiero.

Te lo he dicho con el viento,
jugueteando como animalillo en la arena
o iracundo como órgano impetuoso;

Te lo he dicho con el sol,
que dora desnudos cuerpos juveniles
y sonríe en todas las cosas inocentes;

Te lo he dicho con las nubes,
frentes melancólicas que sostienen el cielo,
tristezas fugitivas;

Te lo he dicho con las plantas,
leves criaturas transparentes
que se cubren de rubor repentino;

Te lo he dicho con el agua,
vida luminosa que vela un fondo de sombra;
te lo he dicho con el miedo,
te lo he dicho con la alegría,
con el hastío, con las terribles palabras.

Pero así no me basta:
más allá de la vida,
quiero decírtelo con la muerte;
más allá del amor,
quiero decírtelo con el olvido.


-
Antología poética. Luis Cernuda. Introducción y selección de Philip Silver. El libro de bolsillo - 583. Alianza Editorial. Madrid.

------------------------------------------------------------------------------


Gustavo Adolfo Bécquer



Gustavo Adolfo Claudio Domínguez Bastida (Sevilla, 17 de febrero de 1836 – Madrid, 22 de diciembre de 1870), fue un poeta narrador, perteneciente al Romanticismo y asociado al movimiento posromántico.
Su obra más célebre son las Rimas y Leyendas. Escribe en El trono y la nobleza y en las revistas sevillanas La Aurora y El Porvenir, en 1854 marchó a Madrid para poder triunfar en la literatura. Para ganar dinero escribe, bajo el seudónimo de Gustavo García, comedias y zarzuelas como La novia y el pantalón (1856) y La venta encantada. Bécquer se enamoró y empezó a escribir las primeras Rimas, como Tu pupila es azul. En 1860 publica Cartas literarias a una mujer, en donde explica la esencia de sus Rimas.
En los días previos a su muerte debido a una tuberculosis, pidió a su amigo el poeta Augusto Ferrán que quemase sus cartas y que publicasen su obra.


"¿Qué es poesía?"

¿Qué es poesía? --dices mientras clavas
  en mi pupila tu pupila azul.
¿Qué es poesía? ¿Y tú me lo preguntas?
  Poesía... eres tú.

http://www.youtube.com/watch?v=Z7aIbGakGsk (0:53)
-En Rimas y Leyendas. Gustavo A. Bécquer. Ed. Francisco López Estrada y Mª Teresa López García-Berdoy. Colección Austral 403, 1ª edición 1997. Espasa Calpe S.A.


"Rima 22 (XXIII): Por una mirada, un mundo"


    A ella. No sé.

    Por una mirada, un mundo;
    Por una sonrisa, un cielo;
    Por un beso... ¡Yo no sé
    Qué te diera por un beso!
-En Rimas y Leyendas. Gustavo A. Bécquer. Ed. Francisco López Estrada y Mª Teresa López García-Berdoy. Colección Austral 403, 1ª edición 1997. Espasa Calpe S.A.

-----------------------------------------------------------------------



Roger Wolfe


Roger Wolfe (Wesrterham, Kent, 17 de octubre de 1962) es un poeta, narrador y ensayísta. El español es su lengua literaria y su estilo está considerado como realismo sucio. Su producción literaria se inicia en 1986, con la publicación de su primer libro Diecisiete poemas.


Poesía

  • Diecisiete poemas
  • Días perdidos en los transportes públicos.
  • Hablando de pintura con un ciego
  • Arde Babilonia.
  • Mensajes en botellas rotas.
  • Cinco años de cama.
  • Enredado en el fango.
  • El invento (antología poética).
  • El arte en la era del consumo.
  • Vela en este entierro.
  • Días sin pan.
  • Noches de blanco papel.
  • Afuera canta un mirlo
  • Gran esperanza un tiempo.

Narrativa

  • Quién no necesita algo en que apoyarse.
  • El índice de Dios.
  • Mi corazón es una casa helada en el fondo del infierno.
  • Fuera del tiempo y de la vida.
  • ¡Que te follen, Nostradamus!.
  • Tiempos muertos.
  • Luz en la arena.

Ensayo

  • Todos los monos del mundo.
  • Hay una guerra.
  • Oigo girar los motores de la muerte.
  • Siéntate y escribe
  • Escrito con la lengua.


"El amor, supongo"

He estado pensando en escribir
un poema de amor
dedicado a mi mujer
pero lo cierto es que no sé
por qué, pero me pongo
increíblemente triste y los poemas
de amor no se me han dado nunca
demasiado bien —o quizá es que nunca
lo haya intentado seriamente—;
supongo que el amor
debe de ser
como esos rarísimos instantes
de felicidad:
si por un momento
los tienes
yo diría
que no es conveniente
andar jodiendo el tiempo

con poemas.


-
Días Sin Pan, Roger Wolfe, Renacimiento, 2007.

----------------------------------------------------------------------

Garcilaso de la Vega




Garcilaso de la Vega  (Toledo ca. 1498 y 1503 – Niza, Ducado de Saboya, 14 de octubre de 1536) fue un poeta del Siglo de Oro.


Empezó a escribir sus primeros poemas según la estética de la lírica cancioneril. La poesía de Garcilaso está dividida por su estancia en Nápoles (1522–1523 y 1533), donde su poesía es marcada con rasgos petrarquistas.En Italia, Garcilaso fortalece su clasicismo.
La obra poética de Garcilaso de la Vega, compuesta por cuarenta sonetos, cinco canciones, una oda en liras, dos elegías, una epístola, tres églogas y siete coplas castellanas y tres odas latina. Garcilaso creó una revolución métrica y estética, al introducir una serie de estrofas como el terceto, el soneto, la lira, la octava real, endecasílabos sueltos, canción en estancias, el verso endecasílabo y su ritmo tritónico, mucho más flexible que el rígido y monótono del dodecasílabo, y el petrarquismo.

El lenguaje de Garcilaso es claro y nítido: selección, precisión y naturalidad y palabra oral más que «escrita»; prefiere las palabras usuales y castizas a los cultismos a la lengua, busca el equilibrio clásico, la estilización del nobilitare renacentista de una lengua vulgar. Garcilaso, prefiere el tono íntimo, personal y confidencial en la poesía a la retórica.
El estilo de Garcilaso es muy característico: cuida especialmente la musicalidad del verso mediante el uso de la aliteración y un ritmo en torno a los tres ejes principales del endecasílabo. Utiliza el epíteto, con la intención de crear un mundo idealizado donde los objetos resultan arquetípicos y estilizados al modo del platonismo.



"SONETO XXVII"Amor, amor, un hábito vestí
el cual de vuestro paño fue cortado;
al vestir ancho fue, más apretado
y estrecho cuando estuvo sobre mí.

Después acá de lo que consentí,
tal arrepentimiento me ha tomado,
que pruebo alguna vez, de congojado,
a romper esto en que yo me metí.

Mas ¿quién podrá de este hábito librarse,
teniendo tan contraria su natura,
que con él ha venido a conformarse?

Si alguna parte queda por ventura
de mi razón, por mí no osa mostrarse;
que en tal contradicción no está segura.

"SONETO XIII"
A Dafne ya los brazos le crecían,
y en luengos ramos vueltos se mostraba;
en verdes hojas vi que se tornaban
los cabellos que el oro escurecían.

De áspera corteza se cubrían
los tiernos miembros, que aún bullendo estaban:
los blancos pies en tierra se hincaban,
y en torcidas raíces se volvían.

Aquel que fue la causa de tal daño,
a fuerza de llorar, crecer hacía
este árbol que con lágrimas regaba.

¡Oh miserable estado! ¡oh mal tamaño!
¡Que con llorarla crezca cada día
la causa y la razón porque lloraba!

-----------------------------------------------------------------------------



José de Espronceda



José Ignacio Javier Oriol Encarnación de Espronceda Delgado (Almendralejo (Badajoz), España, 25 de marxo de 1808 - Madrid, 23 de mayo de 1842, fue poeta del Romanticismo.

En un monasterio al que el poeta fue desterrado por sus actividades intelectuales, comenzó a escribir el poema histórico El Pelayo en octavas reales, que dejó inacabado. Más tarde escribió la novela histórica Sancho Saldaña o el castellano de Cuéllar. En 1835 escribió "El pastor Clasiquino". En 1840, un tomo de Poesías, cuyos temas son el placer, la libertad, el amor, el desengaño, la muerte, la patria, la tristeza, la duda, la protesta social, etc.

Se considera a Espronceda el Lord Byron español, sobre todo en sus dos poemas narrativos más extensos: El Estudiante de Salamanca, sobre el tema del seductor donjuanesco, que se puede considerar como un acabado exponente del género romántico leyenda, y El Diablo Mundo (1841), heterogéneo poema filosófico en donde describe al hombre como un ser de inocencia natural que sufre la realidad social y sus maldades, en el que se incluye el famoso «Canto a Teresa», dedicado a su amante, una de las más grandes elegías amorosas. También escribió gran cantidad de poemas cortos que denominó 'Canciones', de entre los que destaca como el más conocido la «Canción del Pirata»; también figuran «A Jarifa en una orgía», «El verdugo», «El mendigo», «El reo de muerte» o «Canción del cosaco». Todos estos poemas se inspiran en personajes marginados o excluidos de la sociedad.

"A Madrigal"

Son tus labios un rubí
partido por gala en dos,
arrancado
para ti
de la corona de un dios.



-Poesías líricas. El estudiante de Salamanca. José de Espronceda. Colección Austral - Nº 917. Editorial ESPASA CALPE S.A.


"A un Ruiseñor"


Canta en la noche, canta en la mañana,
Ruiseñor, en el bosque tus amores;
Canta, que llorará cuando tú llores
El alba perlas en la flor temprana.

Teñido el cielo de amaranta y grana,
La brisa de la tarde entre las flores
Suspirará también a los rigores
De tu amor triste y tu esperanza vana.

Y en la noche serena, al puro rayo
De la callada luna, tus cantares
Los ecos sonarán del bosque umbrío.

Y vertiendo dulcísimo desmayo,
Cual bálsamo suave en mis pesares,
Endulzará tu acento el labio mío.

-
Poesías líricas. El estudiante de Salamanca. José de Espronceda. Colección Austral - Nº 917. Editorial ESPASA CALPE S.A.

---------------------------------------------------------------------------

Rafael Alberti




Rafael Alberti Merello (El Puerto de Santa María, Cádiz, 16 de diciembre de 1902 - ibídem, 28 de octubre de 1999) fue un poeta perteneciente a la Generación del 27.

En 1920, tras la muerte de su padre, empieza a escribir "Marinero en Tierra", recibiéndo en 1925 el Premio Nacional de Poesía. Años después nace el Alberti comprometido con la política. En 1933 funda la revista revolucionaria "Octubre". Publicó sus memorias bajo el título de La arboleda perdida.

Cabe distinguir cinco momentos en la lírica de Alberti: neopopularismo, gongorismo, surrealismo, poesía política y poesía de la nostalgia.
El primer ciclo de su poesía está constituido por Marinero en tierra, donde expresa su nostalgia por no poder disfrutar del mar de su tierra natal. En La amante (1926) refleja sus impresiones por distintos puntos de Castilla. A esta obra le siguió El alba del alhelí (1927).
El resultado de la segunda etapa es Cal y canto. El gongorismo está en la profunda transfiguración estilística a que se someten los temas. En este libro aparecen unos tonos sombríos que anticipan a Sobre los Ángeles, que abre la tercera etapa, la cuál nace como consecuencia de una grave crisis personal y en el marco de la crisis estética general común. Las características de este poemario son:
  1. Densidad de las imágenes,
  2. Violencia del verso,
  3. Creación de un mundo onírico e infernal.

En el exilio, se inicia el último ciclo de Alberti. De la poesía no política cabe destacar Entre el clavel y la espada (1941); A la pintura (1948), retablo sobre los temas y figuras del arte pictórico; Retornos de lo vivo lejano (1952) y Oda marítima seguida de Baladas y canciones del Paraná (1953), marcados por el tema de la nostalgia, en los que el verso culto alterna con el neopopular, y con momentos de alta calidad, que reaparecen en Abierto a todas horas (1964) y en el primer libro «europeo», Roma, peligro para caminantes (1968).
La obra dramática está integrada por El hombre deshabitado (1930), Fermín Galán (1931), De un momento a otro (1938-39), El trébol florido (1940), El adefesio (1944), La Gallarda (1944-45) y Noche de guerra en el Museo del Prado (1956).

Obras

  • Marinero en Tierra.
  • La amante.
  • El alba de alhelí.
  • Domecq.
  • Cal y canto.
  • Yo era un tonto y lo que he visto me ha hecho dos tontos. 
  • Sobre los Ángeles.
  • El poeta en la calle.
  • Consignas.
  • Un fantasma recorre Europa.
  • Poesía.
  • Versos de agitación.
  • Verte y no verte.
  • 13 bandas y 48 estrellas. Poemas del mar Caribe.
  • De un momento a otro.
  • El burro explosivo.
  • Poesías.
  • Poesías (1924-1938).
  • Entre el clavel y la espada.
  • Pleamar.
  • Poesía (1924-1944).
  • A la pintura,.
  • A la pintura. Poema del color y la línea (1945-1948).
  • Coplas de Juan Panadero. (Libro I).
  • Poemas de Punta del Este (1945-1956).
  • Buenos Aires en tinta china.
  • Retornos de lo vivo lejano.
  • A la pintura (1945-1952).
  • Ora marítima seguido de Baladas y canciones del Paraná (1953).
  • Redoble lento por la muerte de Stalin.
  • Balada y canciones del Paraná.
  • Sonríe China.
  • Poemas escénicos.
  • Abierto a todas horas.
  • El poeta en la calle.
  • Il mattatore.
  • A la pintura. Poema del color y la línea (1945-1967).
  • Roma, peligro para caminantes.
  • Los 8 nombres de Picasso y no digo más que lo que no digo.
  • Canciones del Alto Valle del Aniene.
  • Disprezzo e meraviglia (Desprecio y maravilla).
  • Maravillas con variaciones acrósticas en el jardín de Miró.
  • Coplas de Juan Panadero (1949-1977).
  • Cuaderno de Rute (1925).
  • Los 5 destacagados.
  • Fustigada luz.
  • Versos sueltos de cada día.
  • Golfo de Sombras
  • Los hijos del drago y otros poemas.
  • Accidente. Poemas del Hospital.
  • Cuatro canciones.
  • El aburrimiento.
  • Canciones para Altair.
"Cúbreme, amor, el cielo de la boca..."

Cúbreme, amor, el cielo de la boca
con esa arrebatada espuma extrema,
que es jazmín del que sabe y del que quema,
brotado en punta de coral de roca.

Alóquemelo, amor, su sal, aloca
Tu lancinante aguda flor suprema,
Doblando su furor en la diadema
del mordiente clavel que la desboca.

¡Oh ceñido fluir, amor, oh bello
borbotar temperado de la nieve
por tan estrecha gruta en carne viva,

para mirar cómo tu fino cuello
se te resbala, amor, y se te llueve
de jazmines y estrellas de saliva!



-Antología Poética (1924-1972). Editorial Losada S.A. Nº 92. Séptima edición, 1977. Buenos Aires.

    "¡Oh tú, mi amor!"

      Oh tú, mi amor, la de subidos senos
      En punta de rubíes levantados,
      Los más firmes, pulidos, deseados,
      Llenos de luz y de penumbras llenos.
      Hermosos, dulces, mágicos, serenos
      O en la batalla erguidos, agitados,
      O ya en juegos de puro amor besados,
      Gráciles corzas de dormir morenos.
      Oh tú, mi amor, el esmerado estilo
      De tu gran hermosura que en sigilo
      Casi muriendo alabo a toda hora.
      Oh tú, mi amor, yo canto la armonía
      De tus perfectos senos la alegría
      Al ver que se me abren cada aurora.
-Antología Poética (1924-1972). Editorial Losada S.A. Nº 92. Séptima edición, 1977. Buenos Aires.






No hay comentarios:

Publicar un comentario